Ejercito - MILENO GRANADA

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Ejercito

HISTORIA > PERIODO NAZARÍ

EL EJERCITO EN EL REINO NAZARÍ DE GRANADA
ORGANIZACIÓN MILITAR

El ejército nazarí como unidad se denominaba en árabe yaish. Esta palabra es con que las fuentes nazaríes, designaban a la suma de elementos de caballería e infantería que estaban pertrechados para entrar en combate, sin diferenciar su composición. El ejército estaba compuesto por caballería e infantes. La caballería era la fuerza primordial del ejército nazarí estaba formada por unidades de caballería ligera, la integraban alrededor de 7500 jinetes repartidos por todo el territorio entre guarniciones y puestos para un estado que cubría una extensión de 30.000 km 2. El soldado de caballería ligera del reino de Granada, de mediados del s. XIV, combate de una forma peculiar, muy diferente de la propia de la caballería pesada centroeuropea del mismo período. Su montura, sin protección metálica, aunque con un freno muy eficaz, es apropiada para tácticas de combate basadas en rehuir el choque con tropas pesadas. Se mantiene el uso de la cota de malla, en lugar de la coraza de lámina de acero. El peculiar escudo de cuero es una adarga, de probable origen norteafricano y generalizado en la Península Ibérica. La caballería fue eficaz en talas masivas, algaradas en la frontera nazarí-castellana y en asedios, apoyando a la infantería. Practicaban una táctica de batalla conocida como tornafuye, simular una huida para luego realizar una carga envolvente sobre sus perseguidores, derrotándolos.

La infantería (combatientes a pie) estaba formada por tres unidades militares: por un lado las tropas auxiliares norteafricanas (beréberes), desde el siglo XIV con Muhammad V quedan ya relegadas a tropas de apoyo. Estaba formada por miembros de tribus norteafricanas llegados desde el Magreb en las sucesivas oleadas entre el siglo XIV y XV  y que estaban ya radicados desde hacía generaciones o bien recién llegados. A su cabeza estaba un miembro de la Jassa (nobleza). Estos soldados norteafricanos venían de tribus conocidas como los Masmuda, Zenetes, Gumara (Gómeres) o Abencerrajes (Banú al-Sarráx). Solían estar acantonados en la Frontera (Ath-thagr) formando un cuerpo de guardia fronterizo. Por ello fueron conocidos como "los Zegríes" por los cristianos y entre los suyos.
También estaba la Guardia Palatina. Creada en 1375, estaba formada por conversos al Islam de origen cristiano (elches), normalmente los cristianos habían sido apresados de niños y una vez convertidos al Islam se elegían a los que mostraban una particular inclinación por la armas  y se le daba una instrucción militar muy rígida, y tras una selección, pasaban a  formar parte de la guardia personal del rey.  En ellos se confiaba totalmente por su fidelidad, que la historia demostró ser cierta. La guardia palatina eran en realidad unas tropas de élite.

Y, por último, los musulmanes andaluces y los morabitos o "voluntarios de la fe", estos últimos eran una especie de eremitas-guerreros que venían al reino nazarí a ejercer la Yihad o Guerra Santa. Se radicaban en las fortalezas de frontera (Ath-Thagr) donde hacían una vida contemplativa y participaban junto al resto de tropas en algaradas o incluso batallas cuando se les necesitaba.

Existieron, además, unas fuerzas de reserva que se movilizaron en caso de necesidad y que estaban formadas por cualquier musulmán varón mayor de edad y capaz de combatir. Estas fuerzas o levas estaban formadas por varios grupos sociales:

  • Los burgueses, artesanos, pequeños comerciantes, profesiones liberales u hombres religiosos acudían con sus monturas prestando servicios como tropas auxiliares y caballería ligera de reserva.

  • Los campesinos, actuaron de soldados de infantería de reserva aportando arqueros, honderos, tiradores de venablo y especialmente ballesteros siendo muy respetados por sus enemigos a causa del manejo de la ballesta ya que tenían fama de tirar muy certeros con este arma.

En época de Muley Hacén y Boabdil trajo la aparición de la figura del espingardero, un soldado con una pequeña arma de fuego primitiva, anterior al arcabuz, que participó activamente en la defensa de las poblaciones asediadas por los Reyes Católicos y que a menudo son citados por los cronistas cristianos.

No hay que olvidar tampoco la existencia de una artillería rudimentaria en el ejército nazarí desde el siglo XIV, estando documentados en los asedios de Huescar (1324) y Algeciras (1344), el uso de una especie de protoartillería que comenzó funcionando con nafta para terminar arrojando bolaños (o pellas) de piedra gracias a los llamados "truenos de fuego".
En época de la Conquista de Granada, veremos que esta artillería, que hasta ahora había sido ligera y apenas se había desarrollado, comienza a tenerse más en cuenta en detrimento de la caballería y la infantería que hasta ahora tenía más protagonismo militar.
Los soldados eran todos profesionales, ingresaban en el ejército merced a oficinas de reclutamiento que se ocupaban, además, de todo cuanto afectaba a la tropa. Su sueldo solía cobrase en oro (ratib), siendo los bereberes lo mejor pagados. Otro ingreso de la tropa era la parte de botín que le correspondían tras la batallas. Cuando las tropas emprendían expediciones guerreras eran acompañados por médicos, obreros, e incluso narradores de historias.
En términos muy generales el ejecito nazarí podría contar con 7500 jinetes y 60000 infantes.
El ejército regular del yund del sultán tenía sus principales bases en Granada, Málaga, Guadix y Ronda y los cuerpos de ejército de la frontera, los llamados "Zegríes", casi todos norteafricanos, se establecieron en las fortificaciones fronterizas del reino (Loja, Vélez-Málaga, Setenil…).

RANGOS MILITARES EN EL EJERCITO NAZARÍ

Tanto a la cabeza de esta jerarquía militar como de su organización estaba el Sultán y las autoridades por él designadas a tal efecto, como los visires (wazîr) o ministros,  o los hayib o secretarios. También los familiares del emir podían detentar importantes puestos en la alta jerarquía militar (caso de El Zagal, bajo la autoridad de Muley Hacén).
El sultán podía encabezar el ejército y delegar en estos altos funcionarios su poder o participar ambos (sultán y ministros) en una misma contienda. Ejemplo de esto lo tenemos en Boabdil, que comandaba sus tropas en Lucena en el momento de ser capturado (1483) o en el ejército que Muley Hacén encabeza por tres veces para intentar recuperar en vano Alhama.
Junto al sultán y los visires y hayib-s encontramos otros cargos menores, pero no menos importantes en la jerarquía militar nazarí. Históricamente, tenemos documentadas otras dos importantes figuras:
Por un lado, gracias a la "Lamha" de Ibn al Játib y a las crónicas cristianas, tenemos constancia del Ar-Ra'is, el arráez o "cabeçera" en castellano medieval (que deriva de la raíz árabe "ra's", cabeza). Junto a los arraéces, numerosas fuentes citan la figura del alcaide o caíd (de al-qâ’id, el "dirigente") que ostentaba un poder militar que se equiparaba también en lo administrativo a la figura del walí o gobernador, especialmente en las tierras de frontera. Habitual de este cargo era la tenencia de castillos y guarniciones.

Del resto de cargos en el yund y su distribución apenas tenemos noticias en las fuentes históricas, pero las literarias (Ibn Hudayl al-Andalusí) sí nos desvelan lo que idealmente pudo ser el organigrama completo del ejército regular nazarí ("yund").

Ibn Hudayl, en su "Tuhfat al-anfus wa shi´âr sukkân al -Andalus" nos da algunas pistas de quién era quien en el organigrama militar nazarí:

  • Al-Qâ’id, plural, al-Quwwâd, el "caíd" o "alcaide" castellano, que normalmente eran los juriconsultos u hombres piadosos, curtidos en combates. Al ser personas en alta estima moral, jurídica y religiosa se las confiaba también estos altos cargos. Solía estar al mando de los subalternos y al caíd era a quien se le encomendaba plazas y ciudades

  • Al-´Arîf, pural al-´Urafâ’, en castellano "el alarife", mandos intermedios subalternos, encargados de grandes unidades (algo así como los tenientes, coroneles, etc...).

  • An-Nâzir, plural: An-Nâzirîn, "Inspectores". También subalternos.


El mismo autor, Ibn Hudayl, en otro pasaje su obra Gala de Caballeros, Blasón de Paladines (Siglo XIV), clasifica idealmente lo que debería ser la organización en escuadrones del ejército granadino:

  • 5000 hombres, bandera: "râya" o estandarte, cargo al mando: amîr (emir).

  • 1000 hombres, bandera: "´alam" o bandera, cargo al mando: qâ'id (caíd)

  • 200 hombres, bandera: "liwá" o gallardete, cargo al mando: naqîb (capitán).

  • 40 hombres, bandera: "band" o banderín, cargo al mando: ´arîf (alarife); estos 40 hombres estaban organizado en 8 unidades de cinco hombres: 5 hombres, bandera: "´uqda" o lazo, cargo al mando: "nâzir" (guardián).


LA MARINA

La marina de guerra nazarí no se puede considerar importante. En la batalla del Estrecho, fue la marina de los meriníes la que llevo la mayor parte de la acción, también Aragón presto ayuda  de marina, al ser solicitada por los granadinos en los tratados que con ellos hacían. Aún así, los barcos granadinos realizaron algunas incursiones en las costas cristianas con cierto éxito, e, incluso, intervinieron en favor de los castellanos en un momento determinado en que estos tenían querellas con Aragón.
Los puertos principales fueron los de Almería y Málaga, también se utilizaba como fondeadero Almuñécar, aunque su importancia era menor que la de las otras dos ciudades, en la que había arsenales.



Soldado Ejercito nazari
Grabado guerra de Granada
Casco de Boabdil
Daga de Boabdil
Supuesto casco del último rey de Granada, Boabdil
Banderas de Boabdil
Espada de Boabdil
Miembros del ejercito nazarí
Guerra de Granada
Cuadro batalla de Salado (1340)
 
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