Eugenia de Montijo - MILENO GRANADA

EUGENIA DE MONTIJO, UNA GRANADINA UNIVERSAL
María Eugenia Palafox Portocarrero y Kirkpatrick, condesa de Teba, más conocida como Eugenia de Montijo (nació en Granada en 1826 y murió en Madrid en 1920) fue emperatriz de Francia como esposa de Napoleón III.
Eugenia nació en Granada un 5 de mayo de 1826 en medio de un gran terremoto que sacudió la ciudad, pasando en la ciudad de la Alhambra los cuatro primeros años de su vida, para después trasladarse con su familia a Madrid. No obstante, siguió ligada a su tierra natal. Durante su juventud, visitaba la ciudad con su padre, al que acompañaba en sus largos paseos a caballo, durmiendo al sereno o pasando la noche entre los gitanos, por cuya cultura se sintió fascinada. Asimismo, pasó largas temporadas con su madre en Lanjarón y en su casa de Motril.
En un discurso que pronunció poco antes de su boda, Napoleón dijo: «Prefiero casarme con una mujer a la que amo y respeto que con una desconocida». Gracias a su belleza y elegancia su forma de vestir era alabada e imitada en toda Europa.
Eugenia era una mujer educada e inteligente además de ferviente católica. Decidió tomar parte activa en la política del Segundo Imperio demostrando, como la reina Isabel la Católica, la capacidad de la mujer para cualquier función importante. Por ello desempeñó la regencia del imperio francés en tres ocasiones. En 1869 la emperatriz Eugenia asistió a la inauguración del canal de Suez, construido por su pariente lejano Fernando de Lesseps. Así mismo, apoyó las investigaciones de Louis Pasteur, que acabarían en la vacuna contra la rabia.
Tras la caída del Segundo Imperio Francés, la familia se exilió a Inglaterra. A la muerte del emperador en 1873, Eugenia se retiró a una villa en Biarritz en la que vivió alejada de los asuntos de la política francesa. Su vida adquirió tintes de tragedia novelesca cuando su único hijo pereció en Sudáfrica (1879) a manos de los zulúes.
Murió en1920 a los 94 años en Madrid, siendo enterrada en Inglaterra, al lado de su esposo y de su hijo, que había fallecido en África.